Antes fui un luchador
de los que hicieron la historia, 
buena o mala,
pero dolorosamente cierta: 
La verdadera historia.
Mucho antes,  
fui un espermatozoide
que navegó por los sueños 
de un pepino donjuanezco 
y galán radioteatrero
que hoy no entiende la magia 
tecnotrónica
de finales de siglo.
Y mucho antes, aun, 
un sueño libertario
de mendrugos satisfechos 
asturianos y mafiosos
que se encuentran, por milagro, 
a la vuelta de este río
sin la plata suficiente 
para ser un buen espejo.

Todo eso, fui antes, 
y antes de antes, 
hay vestigios, 
documentos
y alguna que otra 
declaración de principios.
El punto es,
qué diablos soy ahora: 
mendrugo libertario 
espermatozoide alienado 
o un luchador en la lona.
*** Daniel Omar Granda ***



 Icaro
Icaro 
        


 
