Ahí estás,
siempre agazapada,
dispuesta a saltar
en un descuido,
mordiéndome en la boca.

Fuente de la imagen


Conviertes,
lo que pudo ser un canto alegre
en la triste canción de la cigarra.

Ya basta, estate quieta,
con mi dolor
me alcanza.

*** Daniel Omar Granda ***

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