No me enamores porque si lo haces estarás realmente jodida..
Yo amo a lo burro y a nadie le gusta que lo amen así. Si yo te llego a decir: “te amo”, entonces ya valiste, porque soy bruto para amar. Yo amo a lo puro animal. Para mi, “te amo”, es un verbo y lo quiero conjugar 24 horas al día, sin límites, ni reservas.
Se me pierden las fronteras y me entrego por completo, sin ningún horario, ni fechas de caducidad, sin juicios y con total complicidad. Yo amo con la piel, con el corazón, con el alma. Yo amo con locura, con rabia, con tesón. Yo amo con la cabeza para luego perder la razón…
Te volveré loco con mis detalles, con las miles de muestras de cariño, porque para mi son indispensables. Tendré la urgencia de que sepas cuánto me importas y que sepas que estaré siempre contigo. Yo me vuelvo fiel hasta caer gordo, porque jamás me daré a la mitad, yo me entrego todo…
Realmente soy torpe para amar. Un simple beso es todo para mi. Me arma y me desarma, me construye y me derrumba, me aferro como al sol, aunque me queme. Se me deshielan los sentimientos y dentro de mi corren torrentes. Me inundo de sensaciones, de emociones, de las más perversas pasiones.
Se me alteran los nervios, la sangre me hierve, el corazón inventa nuevos latidos. Latidos donde jamás habían existido ,y amo más fuerte. Dentro de mi, mariposas crecen, y me tiemblan las piernas como un adolescente…
Yo amo de la manera más tremenda. Me despertaré pensando en que te amo y, desde la primera hora, te haré saber que ya te extraño. No podré conciliar el sueño, sin haberte dado las buenas noches y decirte cuánto te quiero.
Amo de un puto modo que empalago. Querré llenarte de besos y, aunque sea feo, querré gritar que te amo a los cuatro vientos. No puedo ni se restar afectos, me sangra el corazón cuando quiero, te amaré más de lo que piensas, mucho más hasta de lo que yo pienso…
Yo amo torpemente y sin saber amar. Soy bobo y analfabeto. Soy una terco que siempre se dará por completo. Sin importar cuánto sufra. Así que por favor, no me enamores, porque yo no sé amar…
Icaro
