Regálame un paseo por las calles de Madrid, un beso mientras esperamos que el semáforo se ponga en verde. Una caricia entre sorbo y sorbo de un batido, una confidencia cuando nadie nos oiga.
Un achuchonín sin motivo, una excusa para soñar juntos. Una mirada de esas que lo dicen todo, una ventana abierta que nos haga olvidarnos de puertas cerradas.
Un atajo para llegar antes a donde queramos, un plan para mañana. Un reflejo en el que nos veamos, una alfombra de hojas secas.
Un charco que saltar, un chaparrón bajo el que bailar. Una foto para el recuerdo, un camino que hacer al andar. Una huella en mi vida, un rato para nosotros.
Regálame un paseo y no te preocupes por envolverlo, el lazo ya se lo hago yo a los zapatos. Regálame esa vida que ahora soñamos y pronto se hará realidad.
De Sol al Cielo
Icaro
Muy guapu!!
Me recordó a mis cortejos, paseos e ilusiones junto a Eva.
Madrid…pa “namorase” y volver, mucho calorrrrr jeje..
Madre mía, Tejado, eso de cortejo suena al siglo pasado. Y, si, en Madrid hace muuuucho calor. En Asturias tenemos ire acondicionado de serie, a veces.